Capítulo 10 - SUEÑOS Y REALIDADES
A Lety le impactó la declaración... Solo en sus sueños había oído a Fernando ser tan cariñoso con ella... ¡y ahora le pedía que fuera su novia! Contempló por un momento sus ojos llenos de ilusión... y luego preguntó:
- ¿Lo está diciendo en serio?
FERNANDO - ¡Pero claro que es en serio! ¿Acaso no quieres ser mi novia? ¿Todavía tienes dudas?
LETY - No... no es eso... es que yo...
F - Déjame adivinar... estás pensando en Marcia, ¿no? Porque si es por eso, tienes que saber que ella y yo...
L - Ustedes rompieron su compromiso y cancelaron la boda... lo sé. Ella llamó a Doña Carolina para avisarle...
F - ¿Y entonces Lety... es que no me quieres?
L - No Don Fernando... es que... por un momento pensé que estaba soñando despierta. No puedo creer que me pidiera esto...
F - Pues es verdad mi Lety... Quiero que seas mi novia y que te quedes a mi lado por siempre... ¿qué dices?
L - Pues yo digo que ¡SÍIIIIIIII!
Ella se levantó de un brinco y le dio un gran abrazo... Fernando solo pudo quejarse al sentir el apretón...
L - Huy, ¡perdón! Por momentos se me olvida que no puedo tocarlo...
F - Claro que puedes, pero con cuidado... A ver... novia mía, dame un besito...
L (pensativa) - Tengo una duda...
F - ¿Qué pasa Lety?
L - Me estoy dando cuenta de que desde que lo subieron me ha estado tuteando...
F - ¿Y eso te molesta?
L - No... solo que es raro...
F - ¿Por qué te parece raro? (poniéndose serio) Mi Lety, anoche en ese bar estaba dispuesto a morir porque no te tenía a mi lado... porque me odiabas y despreciabas... pero volví a la vida cuando vi que no solamente me habías traído al hospital, sino que te habías pasado toda la noche esperando por noticias mías. Créeme Lety, soy un hombre nuevo... y este hombre nuevo no puede hablarle de usted a quien es la mujer de mi vida... o sea tú.
L - Ay Don Fernando... qué cosas tan lindas dice...
F - Por favor... ¿podrías tutearme? Es raro que mi novia me hable así...
L (esforzándose) - Tiene...s razón D... Fernando... ¡Chispas! esto va a ser difícil...
F - No mi Lety... lo difícil era estar sin ti... A partir de este día yo voy a hacer que todo sea felicidad para ti... Te amo y no me voy a cansar de demostrártelo...
L - Gracias D... Fernando. Yo también te amo...
F - Mi Lety... me haces tan feliz al decirlo. Oye pero... ¿y mi beso?
Ella estaba inclinándose para besarlo pero, justo en ese momento, la enfermera iba pasando por la puerta y aclaró su garganta para que notaran su presencia.
E - ¿Todavía no se han dormido?
F (sonriendo) - Ya estábamos en eso... sólo estaba despidiéndome de mi novia...
L (también sonriente) - Es que mi novio es un niño malo... no quiere dormir sin su besito de buenas noches...
E - Bueno... pues les doy un minuto para dormirse, o me voy a llevar ese sillón de regreso a su lugar.
Entonces Lety le dio un beso rápido y se acostó en el sillón, aunque sin soltar la mano de Fernando. La enfermera sonrió al notarlo (en el fondo no era tan mala ;)) y la feliz pareja se durmió así, tomados de la mano...
Y esa noche los dos tuvieron un sueño similar al de Cuernavaca.